En Museo Reina Sofía se encuentra enclavado en el antiguo pabellón de
ingenieros militares y fue sede del gobierno militar de Cádiz,
aunque hoy su uso sea menos bélico y más cultural. De enorme grandiosidad y
suntuosas evocaciones este museo recuerda la vieja gloria del edificio y,
también, los secretos que esconde.
Debido a ello una persona que trabajó
en el edificio nos comentaba recientemente: “lo peor del edificio es pasar las
noches allí, se escucha de todo, desde puertas que cierran y se abren y luego
no hay nada abierto o el arrastrar de muebles en los pisos superiores”. Incluso
se habla de “arrastrar de cadenas”, quizás en una quimérica visión del
arquetipo del fantasma victoriano. “Los
compañeros hablaban de experiencias en el interior del edificio, de esos ruidos
extraños e, incluso, de haber visto una figura, una sombra que se pasea por la
segunda planta”.
Y no debe ser fácil trabajar en un
edificio donde, al caer la noche, los bustos que están expuestos en el mismo
crean extrañas siluetas y perfiles “de otro
mundo”.
Entre los buenos investigadores de Cádiz también hay quienes han
tenido sus experiencias en el interior, como el caso de John Pantoja, que en
una visita nocturna al lugar le pareció ver como algo cruzaba por el campo de
visión de su ojo izquierdo, al mirar sólo pude sentir como crujía una puerta y
su pomo estaba “ligeramente suelto”.
Nuestro informante igualmente
indicaba: “No es raro comprobar como se
enciende una luz en la noche, o resuena una puerta o, simplemente, el ascensor
comienza a funcionar solo…” y dejó una intrigante coletilla
diciendo “pero han pasado cosas más gordas aquí dentro, aunque eso deben ser
mis antiguos compañeros quienes lo cuenten, a mi no me pasó
Fenómenos inexplicables en el
museo Reina Sofía de Cádiz (CádizDirecto.Com)